sábado, 28 de septiembre de 2013

Tiempos de alianzas...



Hacer ciudad requiere compromiso, actitud y destreza. Nuestra historia en ocasiones nos pesa de forma negativo, hemos sido una potencia industrial, al amparo y al rebufo de ella, se desarrollo un sector servicios potente con una hostelería y un comercio de calidad. Posiblemente hoy de todo aquello nos queda la cultura industrial, la nostalgia y el complejo siderúrgico más importante del país en manos de una multinacional con sus centros de decisión lejos y que solo nos deja un frio sentido de ocupación. No vemos a Lakshmi N. Mittal principal propietario de la multinacional industrial, residente en Londres, cruzar la ría para adentrarse en nuestra villa y caminar por el casco histórico. Quizá porque no le hemos invitado y tal motivo hace que la ciudad viva de nuevo a espaldas del complejo industrial. No es nuevo, hasta en los momentos más destacados de Ensidesa, Avilés no establecía puentes con la empresa, será nuestro carácter o nuestra manera de entender las relaciones…
Son tiempos de alianzas, de compromisos y Mr.Mittal tiene que saber y conocer que hacemos, como somos y que la ciudad es parte íntegra de su emporio siderúrgico. No puede perjudicarnos, al contrario, creo que debería hacérsele hijo adoptivo de Avilés, igual conseguiríamos que al menos sepa de nuestra existencia.
Hemos sufrido el devastador título de ciudad contaminada, hoy lejos de semejante adjetivo tenemos valores significativos, paseos, ría, parque, centro cultural, casco histórico, museo. Valores patrimoniales que no pasan desapercibidos, hay suficiente inventario para sentirnos orgullosos y fijar objetivos más ambiciosas para una ciudad que ha sabido vivir en lo más alto, en lo más bajo y que ahora precisa recolocarse para recuperar su prestigio y reinventarse para seguir asombrando como siempre lo hizo.

domingo, 1 de septiembre de 2013

Comienza el nuevo curso...

Mañana dos de septiembre primer día laboral después de las vacaciones, damos comienzo al nuevo curso, una expresión que viene dándose al final de la época estival. Este comienzo de curso no solo viene marcado por el regreso a las aulas de niños y jóvenes, sino que viene también marcado por un regreso al orden, a la normalidad de los días. Hay de nuevo que empezar con la rutina del hogar, las prisas, la planificación de los gastos de los niños, las comidas y en definitiva todas esas tareas que desarrollamos, en ocasiones poco reconocidas, pero que son la esencia y el quid de la cuestión, en cuanto al funcionamiento del hogar y la dirección de la familia. Pues bien, pongamos manos a la obra  investidas/os de ánimo, energía y empuje, planifiquemos el nuevo curso con nuevas ideas, cambios y propuestas, preparémonos para afrontar una etapa en la que quizá no se parezca al recorrido anterior, pero estoy convencida será apasionante por una razón, será un reto y salir vencedora/or un objetivo apasionante. Nada ni nadie vendrá a socorrernos, ya hemos visto que se piensa de ello, la macroeconomía es la que llama la atención, a los pequeños nos queda nuestra supervivencia, imaginación y empuje, pues bien, hagamos de ello las armas necesarias para salir victoriosos/as.